Esta fecha nos llama a conmemorar lo trascendente para nuestra identidad como trabajadoras y trabajadores Nodocentes.
También nos invita a la reflexión y nos obliga además, a recordar a las compañeras y compañeros que hoy ya no están, ellos son parte de nuestra historia.
Una historia rica en la conquista de derechos, que nos apuntala de cara al futuro y que nos activa en la memoria de aquello que no puede volver a ser.
Estamos orgullosos de saber que lo logrado hasta aquí parte de una premisa fundamental “El trabajo es un derecho humano social, y multiplicado, es el gran articulador de movilidad social”. Ahí radica la esencia de nuestro ideario, de nuestras convicciones, de nuestra organización.
Las y los trabajadores Nodocentes no somos, ni seremos actores pasivos.
Seguiremos comprometidos, sensibles y protagonistas en el sostenimiento de avanzar en más derechos laborales, como también en mayor dignidad para las y los trabajadores, no solo en actividad sino también al tiempo de nuestro retiro.
Mantendremos viva esa voz unificada que nos caracteriza.
Hoy, en razón de la pandemia, estamos viviendo una situación inesperada, desconocida, pero no por ello dejamos de estar y actuar, de ser nosotros mismos ante la adversidad.
Este 1° de mayo nos encuentra muy unidos en el compromiso y la solidaridad, atentos a quienes más nos necesitan, acompañando a nuestras compañeras y compañeros en sus inquietudes.
Ya volveremos a estar juntos en nuestros puestos de trabajo, en las luchas y en los festejos.
Mientras tanto, pensemos en seguir profundizando esta historia basada en ideales, sueños y luchas cotidianas.
Por lo que hicimos, por lo que estamos haciendo, por lo que haremos, ORGULLOSOS DE SER NODOCENTES.